24 febrero, 2018

«ME SIENTO MUY AGRADECIDO; HAY 50 MILLONES DE PERSONAS QUE COMPRARON UN DISCO MÍO»

✍Mi entrevista al cantante español Raphael
▪️Habla con satisfacción del Uranio que ostentan sólo él, Michael Jackson y Elvis Presley. 
▪️Le gustaría dar el concierto más grande de su vida en Madrid: "La primera ciudad que creyó en mi."
▪️"Estoy muy agradecido; deseando de poder tocar en Cuba. Deseo encontrarme con vosotros muy pronto.", justificó así el concierto abortado en La Habana en 2016.

🇲🇽 RAPHAEL inicia hoy en Mérida, Yucatán, México, su gira americana "Loco por cantar". 
«Me voy a dar un gran y fantástico paseo por América».


🔸HOY el cantante español Raphael inicia en la ciudad de Mérida, estado de Yucatán, México, la etapa americana de su gira "Loco por cantar", que ya tuvo una veintena de actuaciones en ciudades españolas. “Me voy a dar un gran y fantástico paseo por América. Todavía me queda poneros algunos países”, ha dicho.

Antes de partir, le formulé en España un cuestionario de preguntas sobre el impacto de su música a lo largo de toda una vida. Raphael, de manera directa respondió a mis preguntas que ofrezco a continuación mientras recorro algunos pasajes de su vida. 

Cuando tuve la determinación que quería entrevistar a Raphael, no detuve el impulso de una vieja ilusión y le lancé la petición. Le escribí con el corazón y con la pasión de toda una generación.

“Vivir un concierto suyo en La Habana –aún inconcluso–, es un sueño de Cuba, de los cubanos y de los amigos de juventud que corríamos tras sus discos adorables de vinilo”, le escribí. Raphael no tardó ni 24 horas en responderme. Me habló de su vida artística, del ser extraordinario que habita en él; me habló de Cuba –por su puesto– y de la tierra azteca hacia dónde orienta la continuación de su gira desde hoy.

⚫️ SUS CANCIONES DE TODA LA VIDA 


Nació en Linares, Jaén, 5 de mayo de 1943, sur de España. Tiene más de 60 discos editados y un palmarés que incluye 330 discos de oro, 50 de platino y uno de uranio que lo hacen ver como una leyenda de la balada romántica en activo desde hace 57 años

En los 60, despertaba los instintos más primarios en las jóvenes adolescentes. A sus casi 75 años, el español Miguel Rafael Martos Sánchez, artísticamente Raphael, es capaz de ofrecer conciertos estupendos como el que abre hoy en Mérida el ciclo de 16 presentaciones en tierras aztecas. Ya es tan divo del mundo hispano como de Linares.

Con más de cinco décadas de carrera musical, Raphael sigue siendo aquel, como dice en una de las primeras canciones que le lanzaron al éxito. Es todo lo que está demostrando con su imbatible gira, que su música permanece aun vigente y lo presenta como uno de los cantantes iberoamericanos más famosos en activo. Su camino hacia el estrellato quedó inmortalizado en la película "Raphael: una historia de superación personal".

— ¿Que piensa al ver que con más de medio siglo de carrera todavía le sigue gente joven?

— Me siento muy agradecido y sorprendido. Nunca imaginé algo así. Cuando actúo y veo a mi público, de distintas generaciones e igual de entregado, me emociona. 

— Cuanto tiempo ha pasado desde "Yo soy aquél". ¿Se sigue sintiendo el mismo?

— En algunas cosas sí, en otras no. En lo principal, las ganas de hacer cosas novedosas, sí. Naturalmente, he aprendido muchísimo. Tengo una escuela que antes no tenía. El tiempo ha corrido muy a mi favor.

— Ha llovido mucho desde que grabó su primer disco y de su primera actuación en el Madison Square Garden de Nueva York. ¿Imaginaba una carrera de tanto éxito?

— Mi primer disco es del 61; se llama ‘Te voy a contar mi vida’, que fue la primera canción que escribió para mí Manuel Alejandro. En el 62 gané el Festival de Benidorm. Nunca imaginé el éxito; aunque sí tengo prevista mi carrera y tengo que trabajarla mucho. Esta es una vida de trabajo muy duro para que todo salga bien.

— ¿Canta usted al amor de toda la vida?

— El que le canta al amor es Manuel Alejandro; yo soy su altavoz. El que compone es él.

— ¿Cual es su canción más difícil?

— Para mí, ninguna. Si las canto es porque encajan conmigo.

— ¿Y con cuál es la que mejor se siente cuando canta?

— Todas las que canto es porque me siento cómodo; si no, las quito. Puedo estrenar cosas que al día siguiente desaparecen si no creo en ellas.

— ¿Le gusta escucharse a sí mismo? ¿Suele cantar en casa y a solas?

— No, solo oigo los defectos. No canto en casa, ni debajo de la ducha. Me gusta cantar ensayando con la banda o directamente en el escenario. Soy un 10% de voz y 90% de emociones; y estas nacen en el escenario.

—¿Que de cierto tiene que el artista nace y no se hace?

— Nace, aunque uno puede perfeccionar su talento con trabajo.

—¿Ha sentido temor alguna vez antes de salir a escena?

— Sí, pero antes, cuando era muy joven. Ahora no.

— ¿Qué exterioriza un cantante al tener un disco de uranio por haber vendido más de 50 millones de copias tal como lo consiguieron Michael Jackson y Elvis Presley?

— Me siento muy agradecido; quiere decir que hay 50.000.000 de personas que compraron un disco mío. 

—¿Como recuerda a Nino Bravo? ¿Tuvo alguna relación profesional con él?

— El era maravilloso; con una voz espléndida. Una pena que no coincidiéramos nunca. Por desgracia, se nos fue tempranamente.

—Y sus relaciones con los demás cantantes de la balada romántica como Julio Iglesias y otros hispanos, ¿como son?

— Tengo muy buen recuerdo de todos. Con todos los que he colaborado hemos puesto lo mejor de nosotros mismos.

— ¿Qué le parecen las nuevas generaciones de este género?

— Hay gente muy valiosa, aunque prefiero no destacar nombres.

— Usted se lanzó al estrellato en Eurovision. ¿Como valora el nivel de exigencia antes y ahora?

— No tiene nada que ver. Ahora es un gran espectáculo pero quizás le falte la emoción que tenía antes. Antes llevaban a los grandes nombres de cada país. Ahora llevan a gente nueva para desarrollar su carrera. También está bien, pero es distinto.

— ¿Qué le recomendaría a las actuales y futuras generaciones de músicos/artistas para mantenerse en la cima?

— Trabajo y mucha ilusión. Pensar que queda mucho por hacer.

— ¿De dónde saca usted las fuerzas para demostrar la vitalidad que tiene y seguir con esas ganas de disfrutar de su profesión?

— Mi inspiración es mi pasión. A mi me gusta hacer música. Me levanto feliz por ello. El artista cuando es feliz se le nota mucho en el escenario; es su momento. Yo no me veo haciendo otra cosa.

— ¿Cuál es el secreto de Raphael para mantener la voz tan potente a través de tantas décadas de carrera?

— No descuidarse. Procurar llevar una vida sana, comer sano… ser un chico sano en general. En particular, cuidarte de las bajas temperaturas, dormir ‪las ocho horas‬…

—¿Que sensación siente en el cuerpo cuando canta?

— No te lo puedo decir con palabras… no me entenderíais. El mundo interior es complicado.

— ¿Donde le gustaría dar el concierto más grande y masivo que aun no haya realizado?

— Madrid siempre fue mi piedra de toque. La primera ciudad que creyó en mi. Diría Madrid.

— ¿A quién admira un hombre tan admirado?

— A muchísima gente… y todos los que admiro, se lo merecen.

— En la carrera musical de Raphael hay un nombre imprescindible. Aunque se ha referido mucho a ello, ¿que representa Manuel Alejandro en su vida?

— Manuel es un gran músico y un grandísimo artista. Tiene corazón de artista y eso se nota cuando compone.

— Háblenos de los proyectos que le hacen ver como un hombre de bien.

— Todos los proyectos futuros. Si os los digo, os vais a agotar. Son demasiados!

— Hay momentos de la vida que no se olvidan nunca. ¿Que le pasó en Madrid con el director de orquesta francés Franck Pourcel?

— Nunca quedó contento con mis actuaciones, pero un día le hice un gesto de aprobación y se sorprendió. Me dijo que había estado maravilloso. Y yo le contesté: hoy sí, pero... ¿y mañana? Pegó un grito y se despidió. Marchó a París... No había Dios que me aguantara. Siempre tengo algo que decir, pero eso es maravilloso. Soy muy perfeccionista. Afortunadamente, soy así. Pourcel no lo entendió.

— ¿De no haber sido cantante, que otra cosa le hubiera gustado hacer?

— No lo sé… pintor, escultor, compositor… artista, al fin y al cabo.

— Raphael, ¿se puede ser artista con éxito como el suyo, icono, leyenda, y tener una vida familiar normal?

— Se puede perfectamente. Depende mucho del otro 50%; de cómo sea tu pareja y cómo te apoye. Si le gusta lo que eres, es mucho más fácil.

—¿Alguna vez le ha incomodado la fama, le ha privado el ritmo de su vida?

— No, nunca.

— ¿Que es lo último que piensa antes de irse a dormir cada día?

— Lo que he hecho hoy, no tiene remedio. A ver si mañana se me da mejor.

— ¿Qué hace alguien como Raphael cuando tiene un día libre?

— Estar con la familia, los amigos... Es muy importante no perder contacto con tu gente.

Pintar sobre lienzo es su otra gran pasión fuera de la canción. Es tan prolífico que en todas las paredes de las casas de sus hijos cuelgan sus obras. Y ha llegado a afirmar que cambia la típica corbata de regalo de aniversario a sus amigos por algún lienzo suyo.

— ¿Como combina ambas facetas, Raphael?

— Cuando estoy de vacaciones, me encanta pintar.

— Con más de 55 años de carrera a sus espaldas habrá visto de todo en España. Cualquier tiempo pasado fue mejor... o peor. ¿Lamenta algo del ayer o del presente?

— Algunas cosas, sí eran mejor… antes se vivía de forma más tranquila, había más tiempo para estar cerca de la gente. Hoy en día estamos rodeados de aparatos.

— España es ahora un ¡Escándalo! como reza una de sus más conocidas canciones. ¿Qué opina de todo lo que está ocurriendo con la independencia en Cataluña, de la que ya ha admitido que es un "auténtico escándalo".

— Quiero que España permanezca unida tal y como la conocí y la conozco.

— En 2003, tuvo que ser sometido a un trasplante de hígado debido a una grave enfermedad hepática que hizo temer por su vida. ¿Como se siente Raphael 14 años después?

— El 1 de abril, 15 años. Estoy fenomenal. Mi familia fue mi mayor apoyo.

— Usted ha dicho que ¡hay que ser donante! ¿Qué le ha hecho asumir esa conciencia?

— El agradecimiento.

—¿Le queda algo pendiente en su carrera?

— Sí, me quedan cosas pendientes que haré. Solo necesito tiempo.

— Ha mencionado la posibilidad de cantar con Édith Piaf o Elvis ahora que la tecnología lo permite, como ya lo hizo con Rocío Jurado. ¿Sigue esa ilusión pendiente?

— Voy a hacerlo; no se cuándo, pero lo haré. Si queda bonito, lo compartiré con todos vosotros.



Raphael llega a México acompañado de una banda de músicos jóvenes, porque la gente joven siempre ha marcado su carrera, y él va con la onda de los jóvenes como queriendo perdurar en el tiempo. “Dicen que el futuro es de los jóvenes y yo voy a estar en ese futuro”, ha dicho.



— Ha declarado que en Latinoamérica se siente como en casa, que adora a México. ¿Qué es América para usted?

— América lo es todo; es mi segunda casa. Estoy muy agradecido a América.

 — Es ya el momento de que nos cuente cómo va la gira “Loco Por Cantar” que ya este febrero se abre a su etapa americana. ¿Como lo está viviendo? ¿Saldrá algún nuevo disco de esta gira?

— No necesito preparación, estoy muy acostumbrado. Tendré que viajar de país en país y el resto lo hace mi emoción e ilusión de volver a los mismos sitios y conocer al público de siempre y nuevo.

Raphael este viernes 23 de febrero en Mérida, Yucatán.

—Hablemos de Cuba. Después de anunciarse un concierto suyo en la isla el 20 de octubre de 2016, nunca actuó en La Habana ni se explicaron los motivos. ¿Algún día le podremos ver actuar en Cuba?

— Ojalá algún día pueda actuar en Cuba. Estuvimos a punto de concretarlo, pero finalmente no pudo ser.

— ¿Usted es consciente de que cuando estalló el boom de sus canciones, en Cuba era tan popular como en España, a pesar de haber estado inexplicablemente prohibido durante algún tiempo?

— Sí, desde hace muchos años. Desde el principio de mi carrera entró mi música muy fuerte en Cuba.

— La escala musical cubana del año 1966 ubicó a Raphael en el número uno y ‪entre las cinco‬ primeras, dos canciones suyas ("Yo soy aquel" y "La noche"); incluso, entre 1966 y 1968 se decía que "Yo soy aquel" se escuchaba en Cuba mas que el himno nacional. Raphael ya era un ídolo. ¿Que le parece?

— Estoy muy agradecido; deseando de poder tocar en Cuba!! Deseo encontrarme con vosotros muy pronto.

 Confieso que los cubanos nos duchábamos cantando sus canciones, bailábamos al compás de ellas, nos enamorábamos y hasta lo imitábamos de manera histriónica. El “raphaelismo” en Cuba era una obsesión descomunal. 



— Hay un programa ya mítico de la radio cubana, el estelar "Nocturno" que transmite Radio Progreso, la Onda de la Alegría, donde su música nunca ha salido de sus guiones. Tal vez Radio Progreso sea la culpable de que Raphael todavía enamore en Cuba. ¿Lo sabía?

— Sí, lo conozco. Muchos amigos me han hablado de él. Mi agradecimiento a ellos y a todo el que ha ayudado para que mi voz sea conocida allí.

— Gracias de todo corazón Raphael, en mi nombre y el de todos los cubanos e hispanos que le siguen admirando allá, aquí y en cualquier parte.

— Gracias a vosotros, un placer.

— Y que le dice a ese pueblo (cubano) que le ha estado esperando siempre desde que usted tocó sus corazones con esas canciones míticas e inmortales que nos enamoraron y nos siguen cautivando todavía.

— Os dedico mi repertorio; espero pronto poderlo hacer en directo... (en Cuba) mis mejores deseos!

Jesús Díaz Loyola... 
📸 Fotos cortesía de RaphaelArtista

3 comentarios:

  1. Jesús, con esta entrevista a Raphael me has transportado a la Cuba de mis años mozos. Muy bien llevado este intercambio con un cantante que hizo época y sigue manteniendo vivo el espíritu de sus viejos seguidores y cultivando el de los nuevos que se suman. Gracias por este regalo.

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  2. Excelente; todo muy bien estructurado en preguntas y confesiones. Felicitaciones, y un abrazo. Luis

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  3. Esta entrevista en ruso http://viva-raphael.com/pochti-vse-o-rafaele/mirovaya-pressa-o-rafaele/rafael-2010-ye/2018-3/enero---mayo/mi-entrevista-al-cantante-espanol-raphael-2018-2/

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